El radicalismo del Departamento Uruguay se sumó a los reclamos por el tren

"El Comité Departamental Uruguay de la Unión Cívica Radical reitera, como lo ha hecho siempre, su firme reclamo a favor de la reactivación del ferrocarril, medio de transporte que debe ser potenciado tanto para transporte de pasajeros como de cargas, al servicio de la mejora de la calidad de vida y las posibilidades de desarrollo de los entrerrianos.

A pocos días de una elección trascendente, y ante la utilización oportunista por parte de algunos de los legítimos reclamos de la sociedad, nos vemos en la obligación de denunciar la hipocresía y el doble discurso de los que cuando circuló nuevamente el tren de pasajeros entre Basavilbaso y Villaguay no vacilaron en calificar a la empresa de "irresponsable y aventurera", y no acompañaron ese promisorio comienzo, en épocas harto difíciles, seguramente porque el gobierno de turno era radical.

El radicalismo hace suyos los reclamos y las demandas en pos de la reactivación del ferrocarril siempre, no en función de los circunstanciales signos políticos de los gobernantes. Nos opusimos a la entrega de los ferrocarriles de Menem cuando los que hoy se rasgan cínicamente las vestiduras en contra de los demonizados ´90 aplaudían rabiosamente la extranjerización y el desgüace del patrimonio nacional, o bien miraban para el costado.

Coherente con esta posición, el radicalismo entrerriano, en su plataforma electoral para los diputados y senadores nacionales propone firmemente promover, a través de la asignación de recursos del presupuesto nacional, la rehabilitación integral del transporte ferroviario, ya sea de pasajeros como de cargas. De ese modo podremos revertir la irracional configuración del sistema de transporte que se verifica en nuestro país, con una excesiva preponderancia del transporte carretero, que deriva en las conocidas condiciones de inseguridad vial que sufrimos cotidianamente.

A su vez, condenamos las disparatadas promesas del gobierno nacional para implementar un costosísimo "tren bala", de 3.600 millones de dólares, para unir las grandes ciudades del país. Tal desatinada y faraónica iniciativa no resiste el menor análisis, y está lejos de constituir una prioridad en nuestro país, con localidades del interior aisladas por falta de oportunidades de transporte. Con un costo tremendamente menor es posible reactivar adecuadamente los antiguos ferrocarriles nacionales, lo que permitiría integrar efectivamente nuestro territorio, permitir una mejora en las condiciones de transporte de pasajeros, y disminuir los costos de transporte para nuestros productores".-