lunes, 5 de julio de 2010

El impacto de la crisis del federalismo fiscal en la política habitacional

Por José Antonio Artusi
El Fondo Nacional de la Vivienda se integra con un porcentaje de la recaudación del impuesto a los combustibles y sus recursos son distribuidos entre las provincias de acuerdo a una serie de coeficientes dispuestos oportunamente. En el caso de Entre Ríos, tal coeficiente es el 3,90%.
Podrá discutirse la justicia de esta distribución, y de hecho la ley 24.464 establece la necesidad de revisarla cada dos años, disposición que no ha tenido cumplimiento. Pero lo cierto es que brinda una mínima garantía acerca de los fondos que recibirá cada instituto provincial de vivienda cada año y evita el reparto discrecional de fondos por parte del gobierno nacional. En tal sentido, es similar al sistema de coparticipación federal de impuestos.

Sin embargo, a partir de 2003 los ingresos de los institutos provinciales de vivienda comenzaron a tener otra fuente de ingresos del gobierno nacional, que se suman a los ingresos por recuperos de cuotas y a "otros ingresos", tales como venta de pliegos: los denominados "programas federales", "diversos Programas y Subprogramas con el objetivo de disminuir el déficit habitacional existente en el país, ejecutando una política habitacional activa a través de la ejecución de Programas Federales desarrollados para mejorar el acceso a la vivienda de los sectores mas desfavorecidos." (Informe de Auditorias FO.NA.VI y Programas Federales
Ejercicio 2008). A diferencia de los ingresos FONAVI, los ingresos de los programas federales no están sujetos a un índice fijo, sino que pueden, y de hecho son, como veremos, ser distruibidos de manera absolutamente discrecional por parte del gobierno nacional.
Es así que en Entre Ríos los "programas federales" hacen su ingreso tímidamente en 2003, con $ 1.115.784, sumándose a los $ 20.553.207 correspondientes a los ingresos FONAVI. En el 2004 ya representan más de la mitad de estos, y en el 2005 los superan, siendo más del doble. Allí comienzan a decaer en términos absolutos, hasta llegar a ser menos del doble en el 2008: $ 21.065.742 de programas federales contra $ 47.152.838 de ingresos FONAVI.
Es interesante destacar que los ingresos totales, a pesar del aporte que significan los programas federales a partir de 2003, no alcanzan a recuperarse del impacto de la inflación verificada a partir de la salida de la convertibilidad. Es así que los ingresos totales para el caso de Entre Ríos(FONAVI+programas federales+recupero de cuotas+otros ingresos) fueron en 2001 de $ 33.283.343. En 2008, los ingresos totales nominales fueron de $ 92.929.574, que llevados a pesos constantes de 1993 teniendo en cuenta el índice de precios de la construcción del INDEC equivalen a $ 29.727.951.
Pero volvamos a los programas federales para ver cómo el gobierno nacional distribuye estos fondos entre las distintas jurisdicciones. A tal efecto tomaremos datos oficiales extraídos de los Informes de Auditorias FO.NA.VI y Programas Federales de los Ejercicios del 2001 al 2008. Hasta el 2007 pueden consultarse en http://www.vivienda.gov.ar/ y el informe del 2008 me fue facilitado por la oficina del diputado nacional Atilio Benedetti, integrante de la Comisión de Vivienda. Debería publicarse en internet.
Podría esperarse, a priori, que la participación de cada provincia en la percepción del total de ingresos de los programas federales tenga alguna correlación con el porcentaje que les corresponde de los fondos del FONAVI. Sin embargo, la realidad echa por tierra esta presunción. Entre Ríos, que - recordemos - recibe el 3.90% de los recursos del FONAVI, ha recibido sistemáticamente mucho menos en concepto de ingresos de los programas federales: concretamente, el 1,22% en 2003, el 2,78% en el 2004, el 4,40 en el 2005%, el 2,37% en el 2006, el 1,62% en el 2007, y sólo el 1% en el 2008. Como puede apreciarse, el único año de la serie en que el porcentaje supera el 3,90% del FONAVI es el 2005, y lo hace por un escaso 0,5%.
Obviamente, no a todas las jurisdicciones les ha ido tan mal. En el 2007 la provincia de Entre Ríos recibió $ 33.079.722 en concepto de programas federales. Si dividimos tal cifra por la cantidad de habitantes, teniendo en cuenta las proyecciones demográficas del INDEC, nos da $ 26,62 por habitante, prácticamente la mitad del promedio nacional, que fue $ 51,85 por habitante. Sin embargo, para Santa Cruz los programas federales de vivienda significaron $ 543,13 por habitante, 20 veces más que en Entre Ríos. En 2008 las cosas empeoraron, ya que los ingresos de los programas federales en Entre Ríos - a diferencia de los ingresos FONAVI que aumentaron por el aumento de los combustibles - disminuyeron en términos absolutos, llegando a sólo $ 21.065.742, o sea $ 16,77 por habitante, lo que representa solamente un tercio del promedio nacional y casi 35 veces menos que los $ 581,40 por habitante de la provincia de Santa Cruz.
No es necesario decir, por obvio, que miles de ciudadanos de nuestra provincia se ven privados del derecho al acceso a una vivienda digna, consagrado en el artículo 25 de la Constitución reformada en 2008.
Las auditorías del FONAVI tienen información interesante que sirve como insumo para otros análisis, y hay cosas que no dice, que iremos diciendo.
Por ahora baste con estas reflexiones para demostrar que la necesidad de recuperar el federalismo fiscal no es una cantinela de la oposición. Es una necesidad imperiosa de los entrerrianos y de los argentinos, si es que queremos en serio marchar hacia una democracia social, republicana y federal. El derecho a la vivienda y el concepto novedoso del derecho a la ciudad son pilares fundamentales de esa sociedad inclusiva y solidaria que queremos construir.-

José Antonio Artusi
Presidente del Bloque de Diputados Provinciales de la Unión Cívica Radical de Entre Ríos

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